En 2020, los votantes aprobaron una medida electoral para aumentar en un 0.25% el impuesto sobre las ventas y recaudar fondos para combatir el cambio climático y la desigualdad económica. Un año después, la ciudad publicó un plan de cinco años para invertir el dinero. El plan incluye proyectos solares, estaciones para cargar vehículos eléctricos, eficiencia en la construcción y más. Este plan también se enfoca en las comunidades más vulnerables al cambio climático.
El impuesto recaudó más fondos de lo que se esperaba inicialmente, y ahora los votantes pueden decidir si la ciudad se queda con los fondos adicionales o se los devuelve a los contribuyentes.
Este es el texto que verás en la boleta:
¿Puede la Ciudad y el Condado de Denver retener y utilizar todos los ingresos de 2021 derivados del impuesto sobre ventas y uso del 0.25% sobre la Acción Climática, originalmente aprobado por los votantes el 3 de Noviembre de 2020, y continuar imponiendo y recaudando el impuesto hasta el límite del 0.25% permitido por la aprobación original de los votantes?
¿Cómo funcionaría?
Cuando se aprobó por primera vez, se esperaba que el impuesto sobre las ventas recaudara alrededor de $40 millones anuales. Pero recaudó $41.3 millones en 2021. Debido a las leyes de TABOR, las cuales requieren que la ciudad reembolse los fondos recaudados en exceso a menos que los votantes aprueben lo contrario, Denver debe preguntarles a los votantes si puede o no quedarse con los $1.3 millones adicionales para usarlos en proyectos climáticos. La medida también les pregunta a los votantes si la ciudad puede seguir quedándose en el futuro con toda la cantidad recaudada con el impuesto.
¿Quién está a favor y quién está en contra?
No hay grupos organizados que estén abogando a favor ni en contra de esta medida, pero quienes apoyaron la medida original en 2020 la consideraron un paso hacia adelante en la lucha contra la crisis climática a nivel local, en lugar de solo esperar a que el gobierno federal hiciera algo. Quienes se opusieron a la medida en 2020 estaban preocupados de que el impuesto sobre las ventas afectara a las personas con menos ingresos, por eso la versión final no permitió que se impusieran impuestos sobre artículos necesarios, como la comida y los productos higiénicos.