José Esparza temió lo peor cuando empezó a sentir dolor de pecho.
Quizás era un ataque al corazón, pensó. Fuese lo que fuese, Esparza, de 33 años de edad, supuso que estaba relacionado con el diagnóstico positivo de COVID-19 que su prima recibió en abril, cuando estuvo viviendo con ella en Green Valley Ranch. Al esposo de la hermana de su prima lo diagnosticaron con el coronavirus después de que trabajó en el techo de una planta procesadora de carne en Fort Morgan. En esa planta hubo un brote de casos del coronavirus ese mes.
Esparza, quien ahora vive más cerca del centro de Denver, dijo que nunca se hizo la prueba de COVID-19, y asumió que se había contagiado del virus después de haber estado cerca de su prima y compartido una bebida con ella.
Un médico le dijo por teléfono que el dolor de pecho probablemente se debía a la inflamación, no por causa del corazón, y que era un síntoma muy poco común de COVID-19. Pero también tuvo otros síntomas, como fatiga, fiebre y la pérdida del sentido del olfato durante un par de días. Todos estos son síntomas de COVID-19. Otros parientes terminaron enfermándose con el virus.
Todavía no está seguro de si tuvo COVID-19. Pero la experiencia reafirmó su compromiso de nunca contagiarse otra vez o de transmitírselo a alguien más.
"Todavía lo tomo en cuenta y todavía uso una mascarilla", Esparza dijo. Absolutamente no quiero ser una persona que se lo transmita a otros".
Los residentes hispanos de Denver siguen enfermándose y siendo hospitalizados por COVID-19 en mayores porcentajes que el resto de los grupos raciales o étnicos desde que datos publicados por Denver Public Health empezaron a mostrar las diferencias en la primavera. Actualmente suman el 54 por ciento de todos los casos y el 54 por ciento de todas las hospitalizaciones en la ciudad, aunque constituyen alrededor del 30 por ciento de la población de Denver en general.
A nivel estatal, los residentes hispanos sumaron el 36.9 por ciento de todos los casos esta semana, pero constituyen el 21.7 por ciento de la población de Colorado.
Sarah Rowan, doctora especializada en enfermedades contagiosas en Denver Health, ha ayudado a supervisar el programa de pruebas comunitarias del hospital. El programa se enfoca en comunidades de residentes con bajos ingresos y refugios locales para personas sin hogar. Las pruebas realizadas por el hospital reflejan una "diferencia bastante grande" en los porcentajes de resultados positivos entre clientes hispanos y clientes no hispanos.
"De los clientes hispanos/latinos a quienes les hacemos la prueba, (el porcentaje) de resultados positivos es alrededor del 11 por ciento", Rowan dijo. "De los (clientes) blancos, negros, no hispanos, es alrededor del 1 por ciento. Así que una diferencia bastante grande, bastante drástica".
Esos porcentajes se obtuvieron haciendo pruebas en los sitios comunitarios en el oeste de Denver y en el nordeste lejano de Denver. Rowan dijo que también han hecho pruebas en otras zonas y vecindarios, incluidos Five Points y el norte de Denver, pero esas zonas no resultaron en altos porcentajes de pruebas positivos entre residentes hispanos.
Desde mayo, Denver Health ha organizado eventos de un día para ofrecer pruebas, establecido cerca de 50 sitios comunitarios y realizado pruebas en refugios y zonas donde acampan personas sin hogar en la ciudad. Los sitios comunitarios donde se ofrecieron pruebas incluyeron Montbello High School, Re: Vision en Westwood y Servicios de la Raza.
El hospital sigue intentando descifrar por qué los residentes hispanos se están enfermando y siendo hospitalizados desproporcionadamente. Las tasas de personas sin cobertura médica quizás expliquen algunas de las razones.
"Creo que, por un lado, sí es la falta de acceso a pruebas", Rowan dijo. "Creo que si las personas no tienen seguro médico, es menos probable que se hagan la prueba".
Los datos que el Instituto de Salud de Colorado reunió para Denverite muestran que es dos veces más probable que los residentes hispanos no tengan cobertura médica, en comparación con los residentes blancos. A nivel estatal, el 10.3 por ciento de los residentes hispanos no tienen cobertura, en comparación con el 5.6 por ciento de los residentes blancos y el 5.3 por ciento de los residentes no hispanos. En Denver, cerca del 10.5 por ciento de los residentes hispanos no tienen seguro médico.
Gabriela Medina vive en Westwood y trabaja con Esparza en su compañía, BuCu West, una asociación de desarrollo de vecindarios. El mes pasado, el esposo de Medina y sus dos hijos recibieron resultados positivos de COVID-19, mientras que ella obtuvo un resultado negativo en una clínica gratuita en Montbello.
Medina, quien trabaja en iniciativas de alcance comunitario, no tiene seguro médico. Sus dos hijos tienen Medicaid. Se enteró de las pruebas gratis a través de un grupo comunitario.
Tiene algunas ideas de por qué los residentes hispanos en la ciudad enfrentan dificultades con el coronavirus.
"Hay varios factores", Medina, quien es originaria de la Ciudad de México, dijo en español. "[El factor] número uno, para la comunidad inmigrante: es a veces difícil accesar servicios de salud. Y, a veces, uno no sabe a dónde ir".
Varios de los sitios comunitarios para hacerse pruebas en Denver están ubicados en áreas en donde históricamente se han ofrecido menos servicios, y que están siendo desproporcionadamente afectadas por COVID-19.
La ciudad modificó su método de ofrecer pruebas a gran escala en el Pepsi Center para acercarse a las personas donde viven. Es una manera como la ciudad espera abordar las diferencias raciales y étnicas en los porcentajes de pruebas positivas.
Los sitios comunitarios incluyen lugares como Montbello en el nordeste lejano de Denver, en donde David Tovar y su padre, Roberto, se hicieron la prueba desde su automóvil el martes.
Ambos viven en Green Valley Ranch. Decidieron hacerse la prueba como precaución después de haber estado posiblemente expuestos a alguien que dijo sentirse enfermo.
"Pero todavía no sabemos si ellos están bien o están infectados", David Tovar dijo en español.
Cali Zimmerman, coordinadora de gestión de emergencias para el departamento de salud pública de la ciudad, dijo que sitios similares cubren los vecindarios de Elyria-Swansea, Green Valley Ranch, Globeville y el sudoeste de Denver.
Zimmerman dijo que su departamento trabajó con el departamento de parques y actividades recreativas de la ciudad y con los concejales del área para elegir el Parque Paco Sanchez en West Colfax como un sitio donde ofrecer pruebas.
"Nos fijamos en la 'ele' invertida, como la gente sabe", Zimmerman dijo. "Y luego, con base en eso, y luego información...anecdótica, logramos seleccionar las ubicaciones". (La "ele" invertida se refiere al área geográfica de Denver que con frecuencia demuestra desigualdades entre grupos raciales y étnicos y niveles de ingresos.)
El sitio ubicado en Paco Sanchez realizará alrededor de 200 pruebas a personas desde su automóvil, con un horario reducido durante los fines de semana. El horario podría modificarse según la demanda. Zimmerman dijo que empleados de la ciudad tocaron a la puerta de los residentes cercanos para decirles sobre el sitio antes de que se abriera.
La concejal Jamie Torres representa partes del oeste de Denver, incluidos vecindarios con algunos de los porcentajes más altos de casos de COVID-19 en la ciudad, como Westwood. El sitio comunitario en el Parque Paco Sanchez está en su distrito.
Torres mencionó que la ciudad le dijo que el método de solo poder ir manejando al Pepsi Center representaba un obstáculo para las personas de su distrito.
"No observaron mucho tráfico de este lado de la ciudad", Torres dijo sobre el Pepsi Center. "La instalación [del sitio en Paco Sanchez], y luego los sitios de fines de semana en Re: Vision, posiblemente un sitio permanente en Re: Vision, y el Denver Indian Center, como lugares en donde han recibido tráfico con bastante regularidad ... ya están marcando la diferencia".
Otros lugares en Estados Unidos han empleado diversas tácticas para abordar las desigualdades raciales y étnicas de los porcentajes de infección. California, por ejemplo, requiere que sus condados más grandes reduzcan los porcentajes entre sus comunidades vulnerables antes de iniciar algunos de sus esfuerzos de reapertura.
Durante un reciente día soleado, Denise Roque, quien vive en Lakewood, esperó en su automóvil para hacerse una prueba en Montbello.
Se tomó el día libre del trabajo después de sentir síntomas parecidos a los de un catarro, los cuales no son necesariamente similares a los síntomas causados por el nuevo coronavirus. Roque dijo que su abuela se enfermó de COVID-19 cuando estuvo viviendo en un asilo de ancianos.
"Fue bastante preocupante", Roque dijo. "Fue cuando todavía era algo nuevo".
Lupe, quien nos pidió que solo usáramos su nombre de pila, se hizo la prueba visitando a pie el sitio en Montbello.
Sus ojos empezaron a lagrimear cuando habló sobre su situación. Lupe vive en Commerce City y trabaja en un hotel en Denver, y cuando le dijo a su jefe al principio de la semana que no se sentía bien, su jefe le dijo que se hiciera la prueba del coronavirus. Lupe es originaria de la Ciudad de México.
Lupe no tiene seguro médico y no estaba segura de dónde hacerse una prueba. Terminó yendo a un sitio en Denver, en donde se frustró al encontrar que el personal no hablaba español (empleados de la ciudad confirmaron con Denverite que en ese momento no había un traductor en el sitio), aunque habla suficiente inglés para arreglárselas, dijo.
Hacerse la prueba y esperar tres días para recibir los resultados significaría que no podría trabajar. Y quedarse sin trabajar significaría que no ganaría dinero, lo cual probablemente causaría que se retrasara otra vez con el alquiler. No estaba segura de regresar o no a trabajar mientras esperaba los resultados.
Solía trabajar preparando comida, pero desde que la pandemia empezó, su trabajo ahora incluye cocinar, lavar platos y pasar a buscar a los huéspedes del hotel al aeropuerto.
"Ahora, con eso del COVID, regresamos, pero tenemos que hacer todo", Lupe dijo en español. "A mí lo que me da pendiente es cuando llevo gente al aeropuerto. Porque yo voy y recojo gente al aeropuerto que no sé de dónde viene; hay gente que no se quiere poner la máscara".
Puedes hacerte una prueba de COVID-19 en diferentes sitios ubicados por toda la ciudad sin importar si tienes seguro médico o si eres residente legal de Estados Unidos. Haz clic aquí para visitar el sitio web de la ciudad, obtener más información y registrarte para hacerte una prueba en Denver. Para obtener información sobre el servicio móvil de pruebas en Denver, haz clic aquí.
Traducido por Alejandra Castañeda.